En Mecanismos psíquicos del poder, Judith Butler indaga el paradójico proceso psíquico que implica el sometimiento, a la vez sujeción y condición de posibilidad del sujeto.
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E n constante dialogo y debate teórico con Michele Foucault y Jaques Lacan, la obra de Judith Butler realizó un recorrido importante e inaugural en los estudios de género con su teoría de la performatividad del género, pero su obra va más allá y representa un importante punto de partida para muchas preguntas y desarrollos en la filosofía contemporánea. En Mecanismos psíquicos del poder, Butler intenta dar una respuesta a la pregunta acerca de cuál es la forma psíquica que adopta el poder, una pregunta que aparece tras una consideración fundamental: “la doble naturaleza de la sujeción parece conducir a un círculo vicioso”.
El sometimiento, como forma del poder, implica un proceso paradójico: implica una dominación inicial y primordial, pero es también la condición de constitución del sujeto. Desde el comienzo de nuestra existencia ingresamos a un discurso que no elegimos, acatamos el mundo del lenguaje y todo el peso de su ley y su norma porque es el único puente hacia los otros y dependemos de ese lazo para vivir. En este hecho inevitable reside la doble naturaleza viciosa que menciona Butler y que ya desde El género en disputa (1997) viene pesquisando tras su minuciosa lectura de Foucault y Lacan.
En Mecanismos psíquicos del poder se intenta comprender y explicar la ambivalencia estructural en la que el sujeto está implicado: una dialéctica de poder que lo somete a la vez que posibilita su potencia. Para ello aborda los movimientos y mecanismos de la vida psíquica sin reducirlos a una mecánica que abone la diferenciación entre lo externo-político-social y lo interno-psíquico-individual. Son justamente las nociones de poder y discurso desarrolladas por Foucault y la noción de sujeto desarrollada por Lacan las que, nucleando los aportes postestructuralistas, y retomados por Butler, trascienden esta perspectiva reduccionista de dimensiones en oposición.
En la investigación que aquí la ocupa respecto al sujeto, la constitución subjetiva y las formas psíquicas del poder, hay un propósito político y cultural más amplio que un debate formal académico. Sus preguntas y reflexiones hacen eco en el debate actual respecto al horizonte de los movimientos sociales que sostienen discursos utópicos respecto a un futuro pos-liberatorio:
¿a la vuelta de la esquina podemos encontrar el paraíso de liberación después de romper con las cadenas de la norma impuesta por el poder opresor?
Respecto a esto, aparece la pregunta: si reconocemos que no hay sujeto, y por lo tanto tampoco identidad natural pre-discursiva, entonces ¿necesariamente la potencia política va en dirección opuesta al poder?
Butler realiza una inteligente exploración de los mecanismos psíquicos subyacentes a la constitución subjetiva, a las formas de poder y a la relación de inmixión entre sí para afirmar audazmente que lo psíquico es político. Impresiona con una lúcida mirada que escapa a los lugares comunes: no es fóbica respecto al poder ni idealista respecto a la posibilidad de escapar radicalmente a todo sometimiento. Es una lectura muy precisa que elude cualquier reduccionismo ingenuo de fuerzas que se oponen y que reconoce otra lógica posible: la ambivalencia, la contradicción y la paradoja como intrínsecos a la realidad social-política.
Mecanismos psíquicos del poder, por Judith Butler.
Editado por acuerdo entre Cátedra y Calambur S.R.L.
Febrero 2022
216 p.